martes, 3 de noviembre de 2015

TENGO HORA PARA UNA EXOPLASTIA

Cuando le dije a mi madre que no podía seguir hablando por teléfono porque tenía cita para una exoplastia casi la mato del susto. "¿Pero cómo no me dices nada? ya sabía yo que tenías algo malo... despierto a papá y vamos contigo, ¿te lo cubre el seguro?...". Y así un par de minutos, hasta que me dejó explicarle que me lo hacían en la pelu y que era un tratamiento que ni siquiera implicaba cortar las puntas.



La pobre tenía toda la razón, la verdad. El nombre que le han puesto al tratamiento capilar del futuro inmediato se las trae. Suena, como poco, a excisión con bisturí de algún órgano interno femenino.

Pero me envalentoné, abrí el mail... y fue leer detenidamente la información detallada en la nota de prensa bajo el asunto de "Tratamiento capilar reconstructor y de alisado", y llamar a pedir hora para cuanto antes.

Reconozco que lo del colágeno me tira mucho. Los que me seguís ya lo sabéis. Me lo unto en la piel, me lo bebo, me lo trago con un gran vaso de agua y hasta me lo inyecto si se tercia. Y si hay que ponérselo en el pelo, pues también. Pero lo de utilizar el término "llenado" en lugar de "alisado"terminó de conmover mis fibras capilares.

Lo que no han conseguido las cienes y cienes ofertas de queratina que me han ofrecido en los últimos años lo conseguía esta información. Siempre he pensado que para cuatro pelos que tengo, que se expandan lo que quieran, que no les voy a poner límites, pero esto era otra cosa.

El principio activo que utilizan cumple todos los requisitos del "xxxxxxxx sin". No lleva formol, ni hidróxidos, ni guanidina, ni unas cosas llamadas atenolamina y tioglicolato, que deben ser terroríficas. Se trata de una mezcla de proteínas ¡de colágeno! que pasan por un proceso de nanoparticulación (se hacen diminutas) y cationización para interactuar, como si fueran amigas de toda la vida con las proteínas de nuestro cabello. La consecuencia es una red tridimensional que se encarga de llenar las porosidades del pelo, fortalecerlo y alisarlo cabello a cabello.

De todas las indicaciones del tratamiento, yo las cumplía todas: cabello de volumen indeseable (en mi caso ausente), indisciplinado (igual con unos azotes a tiempo en lugar de tanta plancha...), crespo, sin brillo y coloreado (rigurosamente cada dos meses).

Después de tres horas de ponerme al día con las revistas, salí de The Chi Spa (el sitio donde lo hacen, www.thechispa.com) con el pelo liso, que no lamido, fuerte, con algo más de volumen y grosor, sin puntas abiertas y muy bien nutrido.

Mañana me lavo la cabeza. Ya os contaré...

1 comentario:

  1. Qué tal te fue el tratamiento de colágeno para el pelo con ese nombre que da miedo?

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